- Simplifica tus trámites. Puedes usar una única cuenta para transacciones bancarias en euros.
- Aporta mayores niveles de seguridad a tus transacciones.
- Regulariza las comisiones bancarias.
- Impide la devolución del importe del adeudo y asegura el cobro del mismo.
- Reduce costes administrativos, con la optimización de los procesos de pago.